viernes, 20 de enero de 2012

Diferencias en la expresión del estrés entre el hombre y la mujer

Un estudio reciente en el cual se utilizó fMRI (magnetic resonance imaging) con hombres y mujeres, reveló las diferencias entre los mismos cuando se encuentran bajo estrés. De a cuerdo a esta investigación, hay una diferencia marcada entre la actividad cerebral presentada por el hombre, y la mujer. En los hombres el estrés activa el área que se encarga del "fight or flight" es decir luchar o escapar. Esto sucede cuando el flujo sanguíneo aumenta en la corteza orbifrontal derecha del cerebro. Dado a estos resultados se entiende que los hombres cuando se encuentran en una situación estresante, escogen retirarse y darse un tiempo a solas; entretenerse realizando algún deporte, jugando video juegos,  o invirtiendo más tiempo con sus amigos . En algunas ocaciones se pueden notar conductas de riesgo como consumir alcohol y drogas en exceso, o involucrarse en conflictos sociales.

En contraparte, se observó en las mujeres, que el sistema límbico se activa cuando ésta se encuentra en estrés. El sistema límbico está asociado can las respuestas emocionales. Esto se ve reflejado cuando las mujeres se tornan mucho más sensibles o agresivas ante situaciones del diario vivir. En ocaciones las mujeres bajo estrés lloraran o se enfadarán en eventos que no necesariamente causen tristeza o coraje a éste nivel.



¿Cómo prevenir o manejar el estrés?


Según la Asosiación Americana de Psicólogos (APA) hay varias formas de prevenir y manejar el estrés y la ansiedad.
  • Participe de actividades sociales o comunitarias. 
  • Cuide de su cuerpo comiendo saludable, o  haciendo ejercicios.
  • Participe de activades que le brinden placer.
  • Enfóquese en mantenerse optimista y evitar decir cosas negativas tales como: no puedo hacer eso, no quiero, soy muy viejo/a, no soy capaz, etc.
  • Mantega buenas conecciones con aquellas personas cercanas como familiares, amigos y compañeros de trabajos de confianza.
  • Recuerde esos momentos estresantes que ha podido manejar con éxito y trate de llevar a cabo aquello que le funcionó.
  • No huya de los problemas o los deje para resolver luego, esto solo empeoará la situación.
  • Piense que puede lograr lo que se proponga y que todo tiene solución. Si así usted se lo propone, así será.
  • Busque aprender nuevos métodos de relajación o técnicas de meditación. *Respirar profundo ayuda a aliviar el estrés y el coraje; también, ayuda a oxigenar el cerebro permitiendo que pueda razonar mejor.
  • Si se ocupa del cuido de niños, ancianos o personas con incapacidad, haga uso de aquellos recursos de ayuda que se le brinden y cuando se le ofresca un tiempo de descanso tómelo y realice algunas de las sugerencias presentadas en la lista.
Respirar tiene sus grandes beneficios y entre ellos el más importante; oxigenar el carebro. Cuando oxigenamos nuestro cerebro podemos pensar  y analizar, lo que nos lleva a racionalizar con mayor facilidad.

Cuando se encuentre con ganas de gritar, llorar o alejarse de todos, recuerde simplemente respirar. Esto lo puede realizar luego de haber hecho todo su despliegue de coraje, como también puede realizarlo para evitar realizar dicha conducta. En ese caso... Respire profundamente, llene sus pulmones (concentrándose en el área del estómago) hasta que no quepa más aire, y luego exhale lentamente  hasta sentir que su hombligo casi pega con su espina dorsal; repita las veces que sean necesarias hasta que llegue a la relajación. 

Luego de ésto tome de su tiempo para pensar en aquello que le  incomoda tanto y analice si es rasonable o no el que usted se sienta así. Trate de ver los diferentes puntos de vista, no tan solo desde su perspectiva, pero también las de las demás personas involucradas.

¡Muy importante!

 NUNCA OLVIDES RESPIRAR


Si entiende que respirar no es un alivio inmediato, trate de visitar un lugar tranquilo (río, playa, montaña), o busque imágenes de ese lugar que usted entiende que le trae paz y  relajación.Tome su tiempo libre para estar LIBRE. Permítase sentirse libre. Finalmente, si ha dejado que el estrés, con el pasar de los años,  se apodere de ustéd, recuerde que siempre hay alguien dispuesto a ayudarle. Recurra a un consejero, psicólogo o psiquiatra.